
“Cuando la fe y el amor se unen, no hay fronteras que nos separen.”
Del 15 al 20 de julio de 2025, la Fundación Sal del Mundo recibió una visita que quedará grabada en nuestra historia: 27 misioneros de la Iglesia Ciudad de Avivamiento – Puerto Rico viajaron miles de kilómetros con un solo propósito: compartir esperanza.
Días llenos de vida y alegría
Durante cinco jornadas inolvidables, nuestros niños y familias vivieron:
- Juegos y actividades recreativas que llenaron el ambiente de risas.
- Enseñanzas bíblicas que fortalecieron el espíritu.
- Música y dinámicas que unieron corazones.
- Comidas preparadas con amor, como un abrazo en forma de plato.
Cada momento fue una semilla sembrada en la memoria y el corazón de quienes participaron.

Solidaridad sin límites
Esta experiencia nos recordó algo profundo:
“La verdadera ayuda no conoce de distancias, pasaportes o idiomas. Se mide en actos de amor.”
La presencia de nuestros hermanos puertorriqueños nos mostró que, cuando existe un propósito común, la geografía deja de ser una barrera.
Un regalo para nuestra comunidad
Más allá de las actividades, su entrega, tiempo y disposición fueron el mayor regalo. Ellos no solo trajeron recursos, sino que trajeron su presencia, algo que para nuestros niños significa sentirse vistos, escuchados y amados.
Gracias por cruzar el mar por nosotros

A la Iglesia Ciudad de Avivamiento – Puerto Rico, gracias por recordarnos que el amor es un puente indestructible. Nos dejan más que recuerdos: nos dejan inspiración para seguir construyendo comunidad, unidos por la fe y la solidaridad.